Capítulo 17 (parte 1)
Mientras que abrazaba el cuerpo inerte este se evaporó. Una voz
melancólica habló.
¿?: Primero él, ahora tú.
Zelda: O, no.
¿?: Ya ha pasado tu tiempo.
Zelda: ¡Déjame unos años más! ¡Devuélveme a Link!
¿?: El trato se acabó_ salió de las sombras y Zelda vio que era un hombre
sin cara_ ¡Vente!_ y le agarró de la mano.
Zelda se despertó
gritando y le tranquilizó ver a Link, a su lado, abrazándola. Él abrió un poco
un ojo.
Link: ¿Un mal sueño? No me has dejado dormir con tanto grito ¿Qué pasó?
Zelda: Nada... Una pesadilla normal: Que me secuestraban.
Link: No te preocupes_ la abrazó más fuerte_ Estás conmigo. Estás a
salvo.
Zelda: Eso me reconforta, gracias. Pero no es tan sencillo.
Link: ¿Por que? ¿Qué te pasa?
Zelda: No te lo puedo contar_ le resbaló una lágrima por la mejilla_
pero no es alarmante. Tu no te separes de mí y protégeme_ se acurrucó junto él_
protégeme...protégeme..._ y se durmió.
Link suspiró y le
acarició el pelo, pasando la mano cerca de la cicatriz del latigazo. Él pensó
si le había dicho la verdad, y sintió pena: Todo le pasaba a ella. Era
increíble lo que había sufrido y ahí estaba, durmiendo placidamente. Él cerró los ojos y pensó sobre
el tema.
Al día siguiente
Zelda se despertó temprano. Después de despertarse permaneció tumbada, con los
ojos cerrados caviló sobre su sueño.
Zelda: (Hacía mucho que no pensaba en esto, mucho. ¿Ahora que haré? No
puedo hacer nada...)
Sus pensamientos
fueron interrumpidos al abrir los ojos y mirar preocupada a Link.
Link: Te pasa algo. Definitivamente te pasa algo.
Zelda: En serio, no es nada. Solo me asusté en el sueño.
Link: Mientes. Hay algo relacionado con el sueño que no me quieres
explicar.
Zelda: Es algo de cuando era pequeña que aun sigue asustándome.
Link: ¿A si?_ seguía sin convencerse.
Zelda: Por favor, Link. Déjalo.
Link: Zelda... Dímelo. Dímelo. Porfaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa.
Zelda: Que pesadito.
A la noche Zelda
no soñó con nada, pero una voz melancólica repentina apareció en el sueño.
¿?: Seis...
A la noche, día
tras día, la voz aparecía en medio de un sueño. Cada vez decía el número menor:
Cinco, cuatro, tres, dos, uno...
Llegó el día
cero.
Zelda se despertó
asustada. Había llegado el día.
Miró a su lado y
vio que Link no estaba. Miró al techo: Su mayor pesadilla había llegado y ella
antes no se acordaba.
Link: Zelda...
Zelda miró hacia
él. Estaba de pie fuera de la cama y le traía un bollo.
Link: Toma. Cógelo._ se lo dio_ ¿Sabes que día es hoy?
Zelda se
atragantó con el trozo de bollo que acababa de morder.
Zelda: ¿Lo sabes?
Link: Claro. Hoy es tu cumpleaños.
Zelda lo recordó.
Hoy era su 19º cumpleaños.
Zelda: Es verdad. No me acordaba. Gracias por acordármelo.
Link miró el
suelo. Esa mujer no parecía Zelda. Era mucho más nerviosa y parecía mucho más
triste.
Link intentó
animarla con una idea.
y tú, inés, pensando que me lo había cargado. aún hay hasta el capítulo 19! :)
ResponderEliminarClaro Link!! Ella quiere que le pidas matrimonio!! Por eso lo de la cuenta atrás!! Lo desea! No,no, es coña. A ver Romeo de pacotilla, ya abre los ojos y piensa un poco!! Casi es obvio ver lo que le pasa a tu princesita!! Lo que pasa es que estás medio apanpanado! Despierta dormilón!!
ResponderEliminarLink: Perdón, ¿qué? Es que estaba dormido.
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